A menudo en nuestras vidas se presentan bastantes momentos difíciles en los cuales sentimos que nos hundimos y que es el fin.
Me llamó mucho la atención escuchar a un amigo que decía "Dios no nos prometió vivir "bien" acá en la tierra, es más, dijo que aquí tendríamos aflicción pero que no nos preocupáramos porque Él había vencido al mundo". Y es muy común que cuando estemos creciendo en nuestra relación con Dios, las pruebas vengan y todo parezca turbio, y es ese el momento en el que nos debemos preguntar si nuestra vida con Dios se basa en emociones o en la fe.
Nuestra intimidad y relación con Dios no puede depender de circunstancias o emociones. "Dios, es que estoy cansado, estoy triste... Pero tu entiendes", ¡no! Nuestra parte debe ser estar con él en las buenas circunstancias y en las malas.
El ejemplo de Job me confronta: después de ser el hombre más rico, se queda sin nada e incluso se enferma, y su respuesta ante esto fue rasgar sus vestiduras y alabar a Dios ¡vaya hombre! Entonces si la pregunta es qué hacer durante las pruebas, la respuesta es alaba y permanece. Esto es difícil, pero sirve. Funciona como una amistad... Hace unos meses tuve una discusión con una amiga, y sentía que nuestra amistad se iba a caer, pero existían dos opciones: o pasábamos el problema juntas y se haría más fuerte nuestra amistad, o la pasábamos alejadas y nuestra amistad se acababa. De esta manera es la vida con el Señor, si lo buscamos en tiempos duros nos fortalecemos, o nos alejamos y nos debilitamos.
Pero existe una buena noticia para todo esto, existe algo que nos da esperanza, que aquel que empezó la obra en nosotros la perfeccionará y no la abandonará, la acabará (Filipenses 1:6) y también que para los que le amamos, toda las cosas nos ayudan a bien (Romanos 8:28). Dios no pone una prueba porque quiera destruirte, sino porque quiere fortalecerte. Hay una frase que dice "Dios le da sus mejores batallas a sus mejores guerreros" y otro pasaje que dice que él no nos pondrá una carga que no podamos llevar.
¿Algo que te de esperanza? Tu dolor no durará para siempre... Dios tiene un tiempo para tu prueba
Recuerda con gozo los momentos difíciles para que alabes a Dios
Y por último recuerda que veces es necesario pasar por pruebas para entender de lo que Dios es capaz.
1 Pedro 1:7
La confianza que ustedes tienen en Dios es como el oro: así como la calidad del oro se pone a prueba con el fuego, la confianza que ustedes tienen en Dios se pone a prueba con los problemas. Si ustedes pasan la prueba, su confianza será más valiosa que el oro, pues el oro se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la confianza que ustedes tienen en Dios, porque una confianza que ha pasado por tantas pruebas merece ser alabada.